La encina no tiene variedades sino dos subespecies: Quercus ilex subespecie ilex y Quercus ilex subespecie ballota.
Tipos de encinas
La encina forma parte del género Quercus. Su nombre botánico es Quercus ilex y presenta dos tipos:
- Querus ilex: Esta especie presenta hojas estrechas y bellotas de sabor amargo. Este árbol suele crecer cerca de las costas en climas templados, como en Francia y Grecia.
- Quercus ilex rotundifolia: Las hojas de este tipo de encina son más anchas y sus bellotas tienen un sabor dulce. Suele crecer en climas más cálidos, como el norte de África y Portugal.
Ambos tipos de encinas son especies resistentes que presentan copas de hojas grandes y extendidas y troncos gruesos.
Quercus Ilex Subespecie Ilex
La encina Quercus ilex es el Árbol Nacional de España, por lo que su representación en el bosque mediterráneo es grande.
Se calcula que hay 3 millones de hectáreas sembradas con esta especie.
Así que, si pusiéramos todos los árboles juntos, tendríamos un bosque de incalculables proporciones que cubriría una gran parte de la península.
La encina es de la familia de las fagáceas. De estas familias encontramos unas 650 especies en la península y las islas Baleares.
A la encina se le conoce también como carrasca, chaparra o chaparro, y es tan antigua que ya Cervantes la mencionaba en el Quijote, hace 417 años.
Además, los criadores de cerdos también aprecian la encina por sus bellotas.
A los cerdos ibéricos les gusta especialmente el fruto de la encina y lo devoran regularmente como parte de su comida diaria. Los cerdos ibéricos sacrificados que se alimentan del fruto de la encina suelen recibir el nombre de «Jamón de Bellota», que significa «jamón de bellota» o jamón serrano.
Es una de las plantas que mejor favorece a la naturaleza en la lucha contra el cambio climático.
Se considera que cada una absorbe cinco toneladas de dióxido de carbono (CO2) durante el año.
Es un árbol especial del ambiente mediterráneo por su complicidad con todo tipo de terrenos, los rayos solares y los ambientes secos y frescos hasta 1500 m sobre el nivel del mar.
Su fruto es la bellota, que sirve para alimentar al ganado porcino.
Esta es una de las principales industrias de la península, por la abundante producción del jamón ibérico.
El aparejamiento de la encina con otros árboles, como el enebro o el pino, mejora considerablemente el ambiente y en especial el hábitat de los animales.
Esto queda de manifiesto en reservas naturales como el Parque Nacional de Cabañeros en Ciudad Real y Carrascal de la Font Roja, en Alicante.
Su principal característica es que se trata de un árbol de sombra que se eleva 25 metros hacia el cielo abierto.
Posee una gran copa que le da un aire majestuoso desde lejos.
La misma se va ensanchando con los años hasta formar un paraguas perfecto en tiempos de lluvia y una sombrilla ancha para los animales en tiempos de sol.
Quercus ilex subespecie bellota
Esta encina, también conocida como la encina de las bellotas dulces, presenta hojas ovales con borde espinoso, especialmente en la parte baja del árbol.
Es menos exigente que la subespecie ilex en relación a las condiciones climáticas.
Posee un tronco fuerte y ancho de corteza lisa y color grisáceo en su juventud.
Con el paso de los años se va tornando oscuro y se le abren grietas en toda su estructura que les sirven a los animales para frotarse en él.
Su follaje es perenne por lo que sus hojas se mantienen verdes en cualquier circunstancia.
Estas hojas son de gran dureza, lo que evita la excesiva transpiración, pues retienen el agua en la planta.
Gracias a esta condición pueden crecer en lugares soleados y secos de temperaturas extremas con gran diferencia entre el día y la noche.
Las inmensas copas de que hacen gala las subespecies de la encina impiden la entrada de luz solar, lo cual produce humedad en el suelo.
De esta humedad surge una gama mejorada para los animales, especialmente los cochinos, que buscan con avidez la bellota, el fruto de la planta.
Por eso, se le tiene como el árbol ideal en la cría de porcinos porque éstos se arremolinan debajo de la encina buscando su protección y la alimentación de las bellotas.
No olvidemos que el jamón es uno de los alimentos imprescindibles de la península, marca de fábrica ibérica de probada calidad en el mundo.
Así que, cerdos bien alimentados, más y mejores alimentos para todos nosotros.
Las bellotas y su utilidad en el mundo
La bellota es un fruto seco con una sola semilla que no solo sirve de alimento a los cerdos, sino también a las perdices, los patos, los conejos y las palomas torcaces.
Estas últimas se aprovechan del árbol cuando caen las ramas. Y qué decir de los seres humanos que, asadas o crudas, las usan para producir harina y pan.
La bellota surge verde, pero a medida que va madurando va cambiando el color a marrón oscuro.
Cada encina puede producir 20 kilos de bellotas por temporada, de allí la importancia de mantener el árbol en excelentes condiciones.
Para ello es necesario ir aplicándole los cuidados correspondientes, tanto en su mantenimiento como en la protección de la dehesa.
El entorno de las encinas: La dehesa
La dehesa es un tipo de ecosistema privilegiado que se da al suroeste de la península.
Es fundamental en la cría de cerdos en libertad para la elaboración del jamón de bellota ibérico.
Para nadie es un secreto que el jamón es orgullo de los españoles durante varias generaciones por su calidad inmaculada y su sabor a toda prueba en el mundo entero.
Uno de los cuidados que debemos poner en las plantas es el terreno donde vamos a sembrar.
En este sentido, la encina es un árbol que podemos plantar en cualquier terreno, exceptuando los que tengan mal drenaje, sean arenosos o salinos.
Pues, como se trata de una planta xerófila, está adaptada a los medios secos.
Alcornoque (Quercus suber)
El alcornoque es un árbol que pertenece a la misma familia de la encina, con la cual comparte rasgos similares con sus hojas y frutos.
Se diferencia de ella en la gruesa capa de la corteza de su tronco y en sus ramajes.
Coscoja (Quercus coccifera)
La coscoja sí es una planta parecida a la encina, no solo por ser de la misma familia, sino porque se confunden de pequeñas cuando ambas poseen hojas punzantes.
Las dos tienen como fruto a la bellota, diferenciadas solo por la longitud del capuchón que cubre a ésta.
Sin embargo, es importante diferenciarlas porque la coscoja aparece entre las encinas degradadas.
Roble (Quercus robur)
El roble es otro árbol que es familia de la encina, con quien también comparte el mismo tipo de fruto, pero se diferencia en la forma de las hojas.
Mady Rojas
Mi nombre es Mady Rojas Meneses y soy redactora freelance desde el 2018. Encontré el camino para la felicidad a nivel profesional: llenar páginas web de contenidos útiles, interesantes y fáciles de leer como el que ves arriba. Hago lo que amo y amo lo que hago.