5 Tipos y Variedades de Rábano más Famosas

El rábano es una hortaliza que posee compuestos de azufre y actúa como un antioxidante natural que se apoya en su contenido de vitamina C.

Aumenta la flora intestinal, forma anticuerpos en el sistema inmunológico, combate la gripe, refuerza la circulación y sirve para perder peso, entre muchas otras propiedades medicinales.

Sus diferentes variedades son las siguientes:

Daikon, rábano chino o japonés

Este tipo de rábano, aunque tiene nombre japonés (daikon significa ‘raíz grande’ en ese idioma), donde se produce y consume el 90% de la producción, en realidad tiene su origen en Europa y en China.

Su aspecto es similar al de una zanahoria blanca, de textura crujiente y de sabor más suave que el rábano normal. Tiene raíces de 30 cm de longitud.

Está disponible durante todo el año, pero los cultivos de otoño e invierno son los que tienen mejor sabor. Se le utiliza mucho en platos orientales, pues hasta sus hojas son comestibles y versátiles en la cocina. El Daikon se puede comer crudo en ensaladas o en sopas, curry y arroz, entre otros alimentos.

Tiene propiedades medicinales porque posee sodio, potasio, vitamina C y B-6, calcio, magnesio y fósforo, y es alto en calorías y bajo en grasa, sin colesterol.

Del Daikon se produce un jugo que tiene efectos antiinflamatorios y analgésicos, pues sirve para aliviar el dolor de cabeza, las migrañas y la fiebre; promueve la salud digestiva y alivia los problemas respiratorios.

Rábano negro o de invierno

Como indica su nombre, tiene color negro. Se le relaciona con el rábano silvestre, un tubérculo que se cultivaba en el antiguo Egipto, incluso antes de las pirámides.

También se le llama rábano español negro; su forma es cilíndrica o redondeada; su piel es muy difícil de digerir, pero su carne es blanca y digestiva.

Esta variedad es de la familia de las crucíferas cuya principal cualidad es ser usada con fines medicinales por sus propiedades anticancerígenas (posee isotiocianatos y glucosinolatos) y de protección del hígado.

En su composición encontramos sustancias sulfuradas, vitaminas, minerales y fibras. En la cocina, este rábano es ideal para sopas, guisos y platos de vegetales asados, incluyendo las variedades chinas, japonesas y europeas.

Los de las variedades españolas son llamados también ronda española negra, y son grandes y redondos, con la piel oscura y la pulpa blanca. Debemos sembrarlo a finales del verano, de manera de dar suficiente tiempo de madurar antes de las primeras heladas fuertes, pues estos vegetales tardan hasta 70 días para madurar.

Rábanos de primavera

Son redondos u oblongos, pequeños, y los hay de diferentes variedades. Por ejemplo, el cherriette, cabernet, y champión son de piel roja y pulpa blanca.

El ciruelo púrpura, de color morado oscuro. El bengala, rojo y blanco; el huevo de pascua con colores rojo, blanco, rosado y morado juntos. El rábano blanco incluye carámbano, nieve y granizo.

Rábanos de verano

No es fácil sembrar en verano, y el rábano no es una excepción, pues necesita más cuidado, con un desmalezado ligero para no destruir las raíces delicadas.

Los rábanos maduros no dan resultados apetecibles para los agricultores en el clima caluroso del verano.

Sucede que los rábanos que crecen en suelo caliente tienen tendencia a endurecer sus raíces o a que estas de rompan prematuramente. Por eso, debemos mantener el suelo fresco con un mantillo de paja, además de dotarlo con un poco de agua debido a que en esta estación no hay lluvias y si las hay son escasas.

Los rábanos de verano son de forma alargada y de mayor tamaño que los de primavera, aunque se comen crudos como estos. Algunas variedades de verano son el fluo, de color rojo brillante y extremos blancos; french breakfast, de raíz cilíndrica suave y dulce; y ribella, de raíces redondas.

Rábanos de otoño

Son de mayor tamaño que las especies anteriores y deben ser cocidos antes de consumirlos, es decir, no se deben comer crudos. También tienen raíces más voluminosas y su ciclo es de seis semanas.

Son prácticos para ensaladas y para zumos y licuados ligados con naranja. Su color es atractivo, son ricos en vitamina C y también tienen propiedades digestivas y antibacterianas. 

Ainara Salcedo

Soy Ainara Salcedo, y nací en Zaragoza. Hace un tiempo que empecé a colaborar con Sembrar100 en la redacción, edición y maquetación de artículos. Mi grado en Periodismo por la Universidad de Zaragoza me ha ayudado a poder realizar mejor mi trabajo. Dispongo también de el Máster universitario de Periodismo y Comunicación Digital: Datos y Nuevas Narrativas por la UOC.