Imprescindibles para alegrarnos la vida, purificar los ambientes y decorar aquel rincón especial donde quizás sea necesario hacer algunos ajustes para emular un clima tropical selvático o cálido, de mucha luz natural o semisombra.
Son fieles, relajantes, coloridas, algunas con hojas insólitas y tallos en cascada que aunque requieren mínimos cuidados, atenciones que no son tan complicadas siempre que le pongamos corazón al noble oficio de la jardinería.
Adentrarnos en el mundo fascinante de las plantas colgantes es todo un privilegio que compartiremos contigo, en un recorrido sencillo donde aprenderemos todo acerca de 15 espectaculares plantas colgantes de interior que jamás te defraudarán.
La Cola de burro
También se la conoce como Cola de borrego o Nariz de borracho y realmente es sensacional cultivarla en cestas colgantes para decorar espacios muy especiales en tu hogar. Por ello, puede ser una muy buena alternativa como planta de interior colgante.
Está conformada por una sucesión de hojas prácticamente cilíndricas de un tono verde grisáceo que cuelgan gracias a sus largos tallos de hermosa caída.
Estas características la convierten en una planta de interior perfecta para inexpertos. Es además muy pero muy resistente.
No exige grandes cuidados. Solamente se precisa su cultivo en una maceta de muy buen drenaje que deberás ubicar en algún sitio de buena elevación cuando sus tallos alcancen el crecimiento pleno, a fin de proteger sus singulares hojas.
Brotan en primavera y verano florecillas de color rosa en la zona final de los tallos, pero rara vez ocurre, a menos de que se le estimule sacándole a llevar sol durante los días de verano.
Otra característica que la identifica es que se reproduce muy fácilmente, porque solamente debes tomar un esqueje y clavarlo en el sustrato humedecido. Pronto nacerá una nueva planta que en honor a la verdad, será bastante autosuficiente y no demandará grandes cuidados.
Vemos cuáles son las mínimas necesidades de esta planta americana capaz de almacenar agua en sus singulares hojas.
Temperatura
La Cola de burro es superior que muchas otras suculentas en la tarea de adaptarse a temperaturas elevadas. Le gusta el calor. Pero también tolera temperaturas mínimas que oscilen entre 5 a 7°C.
Sin embargo, no es mala idea ayudarle a descansar en el invierno, cuando deberás tenerla en zonas más bien frescas que la mantendrán con sus hojas llenas de agua.
Luz
Sin duda alguna, una prioridad para ella es la necesidad de recibir luz indirecta en forma generosa.
Si bien es cierto que no soporta exponerse a una fuerte insolación, esta planta pide al menos unas 4 horas de sol indirecto. Si eso no ocurre, notarás cómo sus hojas se resecarán hasta perder brillo y forma. No crecerá y se verá en verdad muy pálida.
Sustrato y Abono
Un excelente fertilizante ayudará mucho unas dos veces al año. Pero si adviertes que ha crecido mucho entonces deberás mudarla a una maceta más grande.
Y en cuanto al sustrato, busca en el mercado uno para cactus. O prepara uno con tus propias manos, agregando a un sustrato de tipo universal, perlita y arena a partes iguales.
Renovarle el sustrato conviene hacerlo también en un lapso de dos o tres años.
Pero lo más importante en verdad es lograr el mejor de los drenajes, porque las raíces de la Cola de burro se pudren con una facilidad y rapidez totales.
El exceso de humedad es su peor enemigo.
Riego
Una vez cada 15 días será lo prudente en primavera o verano. De lo contrario, estropearías sus hojas. Y siempre el sustrato tiene que haberse secado, antes de emprender un nuevo riego. Verifícalo siempre con ayuda de tu sentido del tacto.
En el invierno, la planta entra en exceso y no crece. Solamente riégala una vez al mes. No más de eso. Y acá es mucho más importante que el drenaje de la maceta sea perfecto, lográndose un filtrado fluido del exceso de agua, sin que el suelo sea rebosado.
En cuanto al tiempo de reproducirla, espera a que llegue la primavera y que las temperaturas sean suaves. Los esquejes prenderán rápidamente si el sustrato es idóneo.
Ellas tienen grandes habilidades para enraizarse. Un buen momento para hacerlo es cuando comienzan a desprenderse algunas de sus hojas. Allí procede el trasplante.
Siempre que la cultives en una maceta colgante de óptimo drenaje, obtendrás resultados excelentes que serán la sana envidia de todo aquel que observe esta bellísima planta suculenta de bajo mantenimiento y elevadísimo valor ornamental, gracias a su imponente presencia.
Tradescantia
Tampoco precisa de mayores atenciones o cuidados.
Originaria de México, ha tenido una pasmosa habilidad para traspasar fronteras y multiplicarse en el mundo entero con gran adaptabilidad a ambientes diferentes a su lugar de procedencia.
Es una de las favoritas a la hora de lograr contrastes coloridos, gracias a sus hojas moradas con bordes en un tono rosáceo único y unas inflorescencias también rosadas muy veraniegas.
Su corte colgante puede aprovecharse en interiores, siempre que uses macetas para crear efectos tapizantes en áreas iluminadas naturalmente.
Ideal para principiantes del fascinante mundo de la jardinería, la Tradescantia es baja en mantenimiento. No pide mucho.
Es realmente versátil. Responde muy bien si la sometes a un crecimiento colgante, o como ejemplar “cubresuelos” en el jardín de tu hogar, creando alfombras perfectas con su follaje expansivo de raíces que brotan entre sus nudos, lo cual le permite adherirse bien a la superficie que invade.
Las especies más populares, la tradescantia purpurea, la zebrina, la spathacea virginiana o la sillamontana, son leales a su fortaleza de hierro.
También está bien que sepas que hay más de 70 especies de este género, provenientes casi todas, del continente americano, desde Canadá, al norte, hasta Argentina, al sur. Especies que han logrado tener reconocimiento mundial, dada su gran capacidad para cruzarse y crear híbridos en forma natural.Hay quien utiliza hormonas para estimular el enraizamiento, pero en realidad su reproducción por esquejes es de una respuesta superior en esta planta, sobretodo en el período comprendido entre la primavera y el otoño.
Temperatura
Valores mínimos entre 12 a 15°C serán suficientes para que se desarrolle. Y baja humedad.
Es tan noble que se puede amoldar a tiempos de sequía, dado su bajo mantenimiento, pero no puede vivir entre nevadas o temperaturas inferiores a -3°C.
Luz
La buena luz natural es fundamental en su larga existencia. De no ser así, sus hojas perderán vistosidad, se decolorarán hasta verse desteñidas y caídas.
En síntesis, abundante luz para expandirse, crecer y florecer. Pero también se lleva de maravillas con la sombra, siempre que no se prolongue tanto.
Sustrato y Abono
Usa fertilizantes líquidos cada 15 días en el agua de riego, en la primavera, si es que deseas estimular su belleza con un buen abono mientras la Tradescantia crece.
En el período de reposo de la planta, será super apropiado aplicar abonos cada tres semanas o un poco más.
Y todas las partes improductivas de la planta le roban energía, así que, con sumo cuidado, ejecuta una poda que no afecte el crecimiento de sus ramales.
Riego
En maceta, es trascendental el drenaje fluido para que el agua no se encharque el sustrato. Entre riego y riego, ha de estar siempre seco el suelo, tango en interiores, como en jardines y balcones.
Siempre vigila esta variable, o perderás una gran aliada.
Solamente en el verano, riega dos veces por semana el sustrato y cada diez días o más en el período invernal.
Y cuídale de enfermedades ocasionadas por la presencia de mucha humedad, ya que los tallos se pudren al igual que sus raíces, por culpa de un moho gris que también invade sus hojas. Elimina las zonas enfermas y verás que se recuperará rápidamente para mostrarte todo su esplendor purpúreo.
La Hiedra (Hedera Helix)
Se ha expandido hacia el Norte de África, las Islas Canarias, Japón y Asia central. Puede ser una buena opción dentro como planta de interior colgante en tu casa, aunque cuidado porque se expande con facilidad.
Existen actualmente alrededor de 15 tipos identificados, donde resaltan, además de la común y la canaria, especies tales como: Hedera colchica (Hiedra del Cáucaso), Hedera maroccana, Hedera algeriensis (Hiedra de Argelia), Hedera nepalensis (Hiedra del Nepal).
Esta planta ornamental, especial para decorar ambientes, pertenece a la familia de las araliáceas y exteriores también funciona muy bien, pero jamás desperdicies su grandioso potencial para moldearse en jardines colgantes verticales u horizontales.
Su capacidad de adaptación ha sido grandiosa. Saltó de los invernaderos, donde se la mantenía antes a buen resguardo, a zonas cálidas donde crecen ahora variedades enanas o jaspeadas.
Uno de sus mayores atractivos son precisamente sus hojas verde oscuro, que poseen entre 3 a 4 lóbulos que forman figuras ovaladas o elípticas hacia la zona del racimo. También hay tonos manchados, con rayas de color blanco o amarillas, denominadas variegadas.
Tiene flores pequeñas que nada lucen frente al esplendor de sus hojas. Las verás a finales de la primavera y comienzos del otoño. Y frutos o bayas Tóxicas de color amarillo, verde o negro que alcanzan a penas medio centímetro de diámetro.
En exteriores, se comporta como una eficiente trepadora capaz de alcanzar grandes extensiones en tallos que pueden superar los 15 metros, gracias a que ostentan una leñosidad a toda prueba que les permite comportarse como una rastrera capaz de cubrirlo todo: jardines, pisos, paredes o muros.
Incluso, hay algunas variedades que superan los 40 metros de longitud en sus tallos.
De allí que se empleen como plantas cubridoras de muros, rejas, columnas, laderas o sotobosque.
Si la vas a cultivar en interiores, materos colgantes son ideales. No te arrepentirás de cuidarle en casa. ¿Quieres saber cómo? Veamos a continuación algunas indicaciones prácticas.
Temperatura
Sin embargo, cuídala de no exponerla demasiado tiempo a estas variaciones ambientales por largos períodos, porque sus hermosas hojas sufrirán hasta resecarse y morir.
Luz
Poca luz en verdad necesita. Pero sí gusta de una luz natural suave.
Si no está cerca de una ventana, ella no se quejará con cambios en su morfología. No señor. Soportará tranquila ambientes no tan oscuros donde sus hojas se destiñan por falta de la incidencia de rayos solares.
La Hiedra, sin duda alguna, se desarrolla mejor si la expones con regularidad a pleno sol o permanece en sitios sombreados. Y no la matan heladas, ni cambios bruscos de temperatura, porque la valentía de las especies variegadas se impone. Dale sol por algunas horas al día y sabrá agradecértelo con creces.
Sustrato y Abono
Usa un fertilizante mineral al menos una vez al mes cuando llegue la primavera. En verano también procede esta ayuda que la Hiedra agradecerá mucho.
Un suelo rico en tierra de jardín con una mezcla equilibrada de turba y arena será de gran alivio para ella, porque el drenaje fluirá sin problemas de consecuencias fatales para sus raíces.
El pH del suelo ideal para su crecimiento es aquel cercano a 6 y será mucho mejor si puedes adicionar una capa de humus de lombriz o compost, cuando la planta supere los seis meses de vida bajo tu abrigo. Este agregado será espectacular para potenciar su sano crecimiento.
Riego
Por ejemplo, el invierno es la temporada donde menos agua recibirá. Una rociada bastará siempre que el suelo se haya secado por completo, lo cual suele ocurrir máximo una vez por semana en el caso de variedades de interior.
Realiza pulverizaciones eventuales de sus ramas en el invierno,
Aprovecha, además, de podarla al comienzo de la primavera y así estimularás un crecimiento saludable y evitarás la invasión inadecuada de sus flexibles tallos en muros, canalones y hasta tuberías. Si te descuidas ella se meterá por todos lados, haciendo honor a su nombre.
Disfruta de esta planta fiel a tus ideas decorativas renovadoras en el hogar, con un bajo impacto en costo dado su mínimo mantenimiento.
La Columnea
Además de la popular Columnea microphylla, resaltan las siguientes especies: Columnea hirta, Columnea kewensis, Columnea gloriosa, Columnea schiediana y la Columnea aurantica.
La Columnea Microphylla es la especie que mejor se amolda como planta colgante, siempre que crezca en macetas adecuadas, o también asume la modalidad de planta rastrera de gran cobertura en suelos, como bien lo hace la Columnea hirsuta.
Sus tallos son largos y sostienen hojas opuestas perennes y redondeadas. Del mismo modo, aparecen en la zona axilar coloridas flores de colores naranjas, rojas o púrpuras, que tienen curiosas formas tubulares.
Este espectáculo visual le ha dado una fama bien ganada a La Columnea, tanto en primavera como en verano, cuyas masivas flores de colores naranja y rojo colgando de sus largos tallos, recuerdan el movimiento en el agua de los peces “carpa dorada”, con un efecto desbordante que pareciera hacer saltar de la maceta a estas alegres flores tubulares tan fuertes que también pueden regalarnos sus colores alegres en otoño.
En ocasiones, la floración se prolonga hasta la llegada del invierno.
Una característica resaltante se vincula a sus tallos maleables, muy flexibles que nacen con una firmeza tal que les permite crecer para después caer, cual cascada, un verdadero espectáculo visual refrescante que puedes aprovechar al máximo.
Temperatura
Requiere vivir en ambientes cálidos, entre 20 a 22 °C, pero en la temporada de floración la temperatura debe discurrir entre unos 13 a 16 °C.
Las heladas son su punto débil. La Columnea sencillamente no nació para soportar temperaturas bajo cero grados centígrados. Procura siempre no exponerla más allá de 10°C, su límite inferior.
Luz
La Columnea Microphylla admite vivir tranquilamente en sitios de interior muy bien iluminados, siempre que la incidencia de los rayos solares sea indirecta y de corrientes secas o frías.
Coloca la maceta en una zona sombreada de tu hogar y verás cómo rápidamente se desarrollará tu Columnea.
Sustrato y Abono
En verano y otoño es oportuno brindarle un fertilizante mineral que la alimente. Busca en el mercado aquellos que no contengan calcio y aplícalo cada 30 días.
El sustrato, no lo olvides, es ligero y ácido.
El trasplante siempre debe hacerse una vez haya finalizado la floración, cuando desees darle más espacio para crecer en maceta.
Riego
Suelos inundados o encharcados no son recomendables para ninguna planta. La Columnea no es la excepción.La tierra ha de estar humedecida en forma permanente, a fin de que esta planta no pierda la capacidad que tiene de absorber agua para mantener sus hojas y tallos vivos.
Si ves las hojas marchitas o que se comienzan a poner amarillas, es por falta de agua.
También puedes hacer pulverizaciones en sus hojas cuando la humedad ambiental descienda, o notarás que empiezan a verse arrugadas. Eso es indicio de que necesita hidratarse con urgencia. No mojes, eso sí, jamás sus flores porque las dañarás mucho.
La tierra siempre se oxigenará en esta y cualquier otra planta si la calidad del riego es óptima. También se evita la aparición de hongos, caída de sus flores y daño en sus hojas. Remueve el sustrato con una horqueta de vez en cuando y lograrás estos resultados.
El agua de riego debe ser templada y estar ausente de cal, con un alto nivel de humedad ambiental. Cuando el ambiente esté reseco, mete la maceta completa en otro recipiente más grande, colocando en su bandeja piedras mojada o turba humedecida.
Finalmente, cuídala mucho de ataques de bichos como pulgones, aunque ella suele ser bastante resistente y, por lo tanto, es una de las mejores especies colgantes del mundo entero.
Tillandsia o Planta del Aire
Las plantas de interior colgantes suele requerir cuidados y riegos constantes. Sin embargo, no todas son así.
Proveniente del continente americano la llamada Planta del Aire o Tillandsia, es otra versátil especie vegetal que prospera en desiertos y bosques.
Incluso, crece en su hábitat natural sobre árboles de notable altura. También se les llama Claveles del aire, muy fáciles de cultivar, así que si estás incursionando en el mundo de la jardinería no pierdas la oportunidad de sacar adelante un bello ejemplar de la Tillandsia.
Es poco exigente. Tanto que crece igual sobre piedras, árboles, cristales, troncos y hasta soportes de metal, gracias al hecho de que no desarrolla una raíz para vivir. Es una especie totalmente aérea, una planta epífita, que puede sobrevivir atada o abrazada a otra especie de mayor tamaño.
Una muestra de su altísima resistencia y versatilidad es que la pueden mantener viva dentro de un globo de cristal decorativo que le dé buena humedad. O déjala que se abrace a un círculo metálico de cobre. El efecto que producirá seguro será sensacional.
Esto lo logra porque no tiene raíces, sino una especie de ganchos o garfios que se pegan en todos lados.
Temperatura
Sobrevive tanto en espacios al aire libre como en interior.
Familia de las bromelias y las orquídeas, la Tillandsia crece lentamente, pero siempre prefiere alta humedad y clima templado, dado su origen selvático americano.
Uno de los puntos claves para el cultivo de esta planta radica en la temperatura que debe reinar cuando vive en espacios cerrados. Esta planta soporta temperaturas elevadas, de hasta 30°C, pero bajo ciertas condiciones. Humedad alta es una de ellas.
Otra recomendación vital es alejarla de fuentes de calor procedentes de sistemas de calefacción. Y de corrientes de aire frío también.
Pero que quede claro: temperaturas muy bajas, ventarrones helados la matarán. Es ultra sensible al frío y a las heladas. Así que no funciona su organismo cuando las temperaturas son inferiores 10°C. Recuerda que el trópico es su hábitat natural. Un invierno rudo impide sacarla a recibir luz bajo condiciones controladas.
Luz
A pesar de su origen Tropical, no debe crecer nunca bajo sol directo.Pero es importante que al tenerla en interior podamos buscarle un sitio iluminado en semisombra. Extrema estos cuidados en verano porque está acostumbrada a crecer a la sombra de un árbol grande frondoso, en su hábitat original.
Sustrato y Abono
Expertos jardineros recomiendan la aplicación de un abono para orquídeas. Dilúyelo en una proporción de 25%, una o dos veces cada mes. Este nutriente la ayudará mucho, a comienzos de la primavera.
Si usas cualquier tipo de sustrato las hojas de tu Clavel del aire pueden quemarse con facilidad.
Riego
Prácticamente, esta planta no necesita que la riegues. Es muy autosuficiente.
Por eso se nutre de la atmósfera que la circunda. Basta con pulverizarla con agua de vez en cuando una vez por semana, logrando de esta forma que sus hojas queden impregnadas del rocío. Su exótica belleza resaltará ante los ojos de todos.
Una terraza te dará fama de excelente cultivador de los Claveles del aire.
Nada mejor que regarla con agua de lluvia, la más limpia de todas. Si tienes esa posibilidad, hazlo sin excesos.
Y si incursionas en el mundo de los jardines verticales, esta planta hará maravillas con sus habilidades aéreas. Y no debes, en estos ambientes, preocuparte mucho por ella. Recuerda que este tipo de plantas se alimenta por sus hojas. Un abono líquido que le agregues al pulverizador de hojas será más que suficiente para ella.
En invierno, por el contrario, se espaciarán a 3 o 4 días los riegos, porque recuerda que en interior el uso de aires acondicionados o sistemas de calefacción tienden a secar el ambiente.
Un dato que te ayudará a regular la intensidad del riego, lo proporciona el cambio en la coloración de las hojas tras recibir el agua, lo cual indica que la planta no está recibiendo la humedad que necesita.
También puedes usar el método de inmersión, cuando se trata de atender a ejemplares grandes. Usa un recipiente grande y sumérgelas durante 20 o 30 minutos, a fin de que absorba toda el agua que necesite.
Pero si ha sido cultivada en una esfera de cristal, no puedes regarla dentro porque contribuirás a su pudrición al elevar de forma inconveniente su humedad ambiental.
Disfruta de las bondades que esta singular planta aérea te regala, a cambio de muy poco.
Nido de Ave
El Nido de ave, originaria de las selvas tropicales australianas, es un helecho de hermosas hojas frondosas que adquieren la forma de una corona.
También se consigue el Nido de ave en Japón y la India, además del continente australiano.
Sus hojas, en forma de lanza y de un hermoso color verde manzana, alcanzan desde 45 a unos 120cms de extensión, adquiriendo una morfología robusta de fácil cultivo interior que le da ventaja sobre otras especies de helechos que suelen ser bastante delicadas.
Con apenas algunas recomendaciones de estricto cumplimiento, el Nido de ave puede embellecer cualquier espacio de tu casa sin mucho mantenimiento.
Temperatura
El Nido de ave vive tranquilo en temperaturas mínimas que oscilen entre 3 a 5°C y máximas de 25°C.
Luz
Aunque es uno de los tipos de helechos más fuertes, el lugar en casa donde lo ubiques será de vital importancia para que sobreviva mucho tiempo fuera de su hábitat natural, muy húmedo, selvático.
Busca un sitio muy bien iluminado, pero donde obtenga también un poco de penumbra o sombra. El Nido de ave jamás debe recibir directamente los rayos solares (para una correcta fotosíntesis), ya que la insolación lo arruina.Como es tan resistente, soporta incluso que lo tengas como parte integrante de la decoración de un baño, inclusive se adapta a espacios de muy baja luz, pero la idea es que pueda lucirse en tu casa, en un lugar de condiciones ambientales estables, buena iluminación y humedad alta.
Sustrato y Abono
Y es indispensable que la fertilización se ejecute sobre un sustrato húmedo, no seco.
También una opción sencilla y muy valedera es la aplicación de barritas de fertilizante de lenta liberación, cada 2 o 3 meses.
Y lo aconsejable en cuanto al sustrato, es que tenga una composición de tierra de brezo o de castaño, que lo mantenga ácido.
Riego
Este helecho necesita riegos regulares con pulverizaciones adecuadas, que no empapen el sustrato.
Debes crearle una atmósfera humedad permanente. Otra forma idónea es colocar en la base de la maceta una bandeja con bolitas de arcilla humedecidas.
Al igual que la mayoría de las especies vegetales, en invierno los riegos se reducen y solo se reanudarán después de que todo el sustrato se seque.
En esta época del año tan complicada para las plantas, también puedes optar por colocar un platito con agua debajo de la maceta, pero el proceso de absorción no deberá prolongarse más allá de 15 minutos, a menos que encima se coloque una capa de gravilla.
Pero debe quedarte claro que siempre hay que estar regando el follaje de este helecho, sin empapar o encharcar la tierra. Las pulverizaciones permanentes son la mejor opción en primavera y verano, donde aplicar rociados unas tres veces por semana es muy beneficioso.
- Bordes de hojas secas: el helecho está saturado de calor ambiental. Urge pulverizar su follaje.
- Manchas marrones: ha recibido alguna corriente de aire frío que no soporta. Busca protegerle cambiándole a un lugar donde esté menos expuesto.
- Hojas amarillentas: el sol está incidiendo en forma directa sobre el follaje del helecho. O necesita un sustrato más ácido.
- Podredumbre: si la base de la planta empieza a pudrirse, lamentamos decirte que te excediste en el riego y las raíces han sido afectadas.
Peperomia
De nombre científico Peperomia, a esta planta también se le conoce popularmente como Ombligo de tierra, Pimentero o Cola de ratón. Se incluyen en la familia de las Piperáceas.
Son originarias de regiones sub tropicales y tropicales de Asia, más concretamente en la zona del influencia del mar Pacífico.
También hay hermosas variedades en América del Sur.
Tiene una flor pequeñita, nada llamativa, que se agrupa en una espiguita de color blanco. Estas son las especies más conocidas: Peperomia angulata, Peperomia scandens, Peperomia metallica, Peperomia magnoliifolia, Peperomia hederiefolia y la más popular, la Peperomia caperata.
Es altamente recomendable en interior. La Peperomia obtusifolia, que nace en Sudamérica, es ideal para decorar espacios bien iluminados de tu hogar.
Temperatura
La mejor temperatura para la Peperomia es de entre 16 a 21 °C. Y en cuanto a la mínima que resiste, es de 4°C.
Luz
En casa, debes tenerla en un espacio iluminado, sin que los rayos de sol caigan directamente sobre sus hojas. Recuerda también que si el lugar es muy opaco no se desarrollará normalmente. La falta de luz retrasa su crecimiento.
En general, todas las plantas variegadas siempre necesitan una buena dosis diaria de luz natural, porque la fotosíntesis es de menor intensidad.
Sustrato y Abono
Un buen sustrato también le ayuda mucho a crecer robusta, con buena salud.
Una mezcla de tierra de jardín mezclada con 1/3 de arena y la misma cantidad de tierra ácida, bastará para que adquiera todos los nutrientes necesarios mientras escurre el exceso de agua que proviene de los riegos.
Y entre la primavera y el otoño, debes suministrarle un abono de origen mineral mezclado con el agua de riego. Nunca lo esparzas sobre ella en forma concentrada.
Una vez al mes es la periodicidad ideal para abonar esta planta de interior.
Riego
Como esta planta también es exigente en cuanto a la humedad ambiental, que siempre debe ser alta, puedes adoptar la siguiente técnica para tener una hermosa Peperomia en casa.
Busca un plato grande de tiesto y cubre con grava o gravilla toda su superficie. Encima, puedes colocar en macetas individuales las Peperomias que desees, 2 ó 3 quedarán muy bien.
El agua que cubre la gravilla la puedes calcular con un dedo. Esa será la medida que garantiza un nivel de humedad adecuado para esta planta.
No obstante, el riego convencional siempre será moderado, con lapsos suficientes entre uno y otro, que permitan la absorción total del agua que eches.
En invierno ya sabes que debe reducirse lo más posible, para evitar la pudrición de raíces y tallos. Y al llegar el verano, puedes ponerla en algún sitio en exterior, pero con buena sombra, para que reciba una buena dosis de sol, sin excesos.
Por último, recuerda que sus llamativas hojas no deben mojarse en forma abundante.
Callisia Repens
La Callisia repens, es una planta americana perteneciente a la familia Commelinaceae. Es una suculenta Perenne.
Es una planta de tan fácil propagación o multiplicación que basta con tomar uno de sus tallos y mantenerlos en un envase con agua para que “prenda” con prontitud. También sirve un pote relleno con buen sustrato. Verás como en cualquier época del año obtienes nuevos ejemplares de la Callisia. Pero es menester que recortes los tallos sobresalientes con delicadeza, para renovarla.
Pero cuando necesitas que crezca como planta colgante hay que dejar que los tallos cuelgan como mejor les parezca.
Florea también en forma prudente, nada espectacular. La vistosidad se concentra en sus hojas, que en ocasiones adquieren un tono violáceo en el revés de la misma.
- La Callisia fragans, oriunda de México, es muy popular porque su mantenimiento es realmente poco complicado.
- Callisia monandra es la otra variedad latinoamericana.
Tiene ciertas características distintivas: desarrolla unas “rosetas” poco compactadas y las hojas se organizan en forma más espaciada que otras variedades de Callisia. Las hojas se alternan y sus tallos son más delgados, con unos 70 cms de altura, pero tienen además otros tallos secundarios que emiten rosetas terminales de dónde saldrán nuevas plantas, debido a que aparecen raíces adventicias.
Estas ramificaciones van apareciendo en las axilas de hojas que ya se han desprendido de la planta madre. Así aparecen sus hijuelos.
Veamos cómo darle la mejor de las vidas.
Temperatura
Crecen y se desarrollan en climas frescos, con temperaturas que rondan entre 15°C a 30°C. Intolerantes ante las heladas, debes cuidar tu Callisia de vientos fríos invernales. Nada es peor para su salud.
En casa, trata de mantenerla siempre a buen resguardo
Luz
Aquellos ejemplares de esta planta que viven en oscuridad desarrollan tallos muy largos y pocas hojas. Así que proporciónale un lugar iluminado y será tan feliz que pronto tendrás nuevas plantas a partir de esquejes. Es muy fácil de multiplicar.
Sustrato y Abono
Aplica un buen fertilizante líquido a la Callisia unas dos veces al mes, pero en dosis bajas que adicionarás al agua de riego.Esta planta en realidad no demanda un tipo de sustrato específico, tolera cualquiera pero de tipo orgánico y de excelente drenaje.
Atrévete a preparar un buen sustrato en forma casera para tu Callisia. Siempre que tengas las materias primas necesarias, conseguirás resultados excelentes. Ármate con la fibra de coco y la turba rubia, que suele tener un pH de 6 o 6,5. La mezcla debe contener un proporción de un 60% de la turba rubia y fibra de coco se llevará el resto.
Esto se llama sustrato base. Después añades un 10% de tierra de jardín y, de conseguirlo, puedes adicionar poliestireno expandido, material plástico que se espuma o crece, muy empleado en el sector de la construcción y de fabricación de envases. Tienes que triturar este plástico hasta dejarlo como un grano de lenteja. Con esta preparación darás mucha mayor estabilidad física al sustrato y mayor oxigenación.
Riego
Lo contrario ocurrirá en invierno, cuando la proporción de agua que reciba la planta deberá ser muchísimo menor. Una vez al mes bastará, siempre que el sustrato se haya secado por completo.
Otro consejo importante es evitar que las hojas permanezcan humedecidas mucho tiempo. Elimina el exceso del agua en las mismas para evitar que se deterioren.
De vez en cuando, aprovecha eliminar o podar las hojas y ramitas que se vayan secando.
La Callisia tiene muchas variantes de buen follaje que contribuirán a equilibrar los ambientes especiales de tu casa. Escoge la que más te guste y completarás excelentes decoraciones con un toque distintivo natural.
En definitiva, cuida que no se encharque el sustrato o las raíces no aguantarán el exceso de humedad. Esa es parte del secreto de conservación de esta planta fiel a su temperamento duradero.Purpurina o Tradescantia pallida
Familia de la Commelinaceae, alcanza unos 40 cms de altura y sus tallos son de crecimiento colgante, con una indescriptible resistencia que le permite vivir dentro o fuera de la casa. Soporta sol radiante tanto como una buena sombra.
Lo más impactante son las características de sus hojas: de color morado y borde o filo rojizo, le dan una distinción única a esta planta ligeramente colgante que también en maceta colgante se propagará bastante bien.
Su estado ideal es el cubrimiento de suelos, dado su carácter rastrero. En el verano, aparecen unas pequeñas inflorescencias de color rosado que hacen un estupendo contraste visual con las hojas moradas característica de esta planta.
Si eres principiante en el mundo de la jardinería, esta planta elevará tu autoestima con su alto rendimiento. Produce, por ejemplo, un efecto de tapizado que te hará sentir muy satisfecho, inclusive cuando se la mantiene en una maceta grande, porque obviamente necesita expandirse.
Es además una gran purificadora de ambientes. Sí. Por eso en oficinas también la cultivan, con miras a mejorar la productividad laboral, porque la respiración de los trabajadores es más limpia y, por ende, las ideas fluirán mucho mejor. Si la tienes en tu habitación, pues igualmente te reportará beneficios.
También es capaz de eliminar olores desagradables.
Temperatura
En sequía sufrirá notablemente, por lo que es necesario protegerla de climas extremos, porque el invierno severo tampoco le favorece.
Luz
La iluminación natural debe siempre estar presente a lo largo de su vida, pero sin que el sol recaiga directo sobre sus hojas. No tolera climas extremadamente calurosos o muy fríos.
Ella se relaja en sombra bastante bien, así que no habrá problema alguno en que la mantengas en un lugar sombreado de tu casa.
Es más. Si no alcanza diariamente una luz natural buena, sus hojas se desteñirán hasta secarse por completo. Por eso necesario cultivarla a media o plena sombra, en caso de que en interior no contemos con un buen sol. Ella se adaptará y sus hojas retomarán su tono habitual.
Pero debe quedar claro algo importante: las tonalidades del morado de sus hojas pueden variar de acuerdo a las distintas estaciones del año, teniendo mayor o menor intensidad violácea.
Sustrato y Abono
Detesta vivir en suelos pesados con gran retención de agua. Y le va muy bien recibir un buen abono orgánico en primavera, cuando será mayor el consumo energético de la planta debido a la llegada de la época de floración.
Abona la planta cada 15 días en su fase de crecimiento y cada 3 semanas en su estado latente o de reposo.Del mismo modo, aprovecha la primavera para efectuar trasplantes, porque ha subido la temperatura y seguramente han aparecido nuevas raíces que darán nuevas plantas. Por esquejes también puedes lograr obtenerla. Hay quien le agrega hormonas para favorecer el enraizamiento.
Abono orgánico al principio de primavera es ideal en este momento de multiplicación de la planta.
Riego
Los excesos de agua afectan a todas las plantas en general. Y si se trata de una planta adulta, con raíces fuertes, hasta puede aguantar sequía, sobretodo las que viven en jardín.
No necesita en realidad de grandes jornadas habituales de riego. Intensifícalo cuando cultives una planta joven que necesita crecer y fortalecerse.
La Tradescantia, además, tiene otra gran bondad: puedes hacer combinaciones decorativas para tu balcón mezclándola con otras plantas florales, como la Surfina rosa y la Mandevilla rosa. Son sencillamente fabulosos los contrastes naturales que lograrás en una jardinera amplia que puedes mantener en tu balcón en la primavera.
Poto plateado
Tiene cualidades únicas en sus hojas de color verde intenso, de textura aterciopelada, con forma de As y unas curiosas manchas plateadas que originaron el nombre de Poto plateado.
Si la cuelgas del techo y la dejas crecer como una mata colgante, o en el tramo superior de un estante alto, ella estará en su esplendor con prontitud.
Temperatura
Prefiere temperaturas cálidas, pero aguanta hasta 15°C muy bien. Solamente si la sometes a bajas extremas, sus hojas comenzarán a caer, así que ahórrate semejante consecuencia de alto impacto.
Luz
Pero no resiste sol directo. La matarás si la expones. Debes escoger una buena estancia con luz natural suficiente, pero la necesita para crecer sana y fuerte.
Sustrato y Abono
Un sustrato universal y una maceta de cerámica son claves para que el Poto plateado viva en tu casa.
Con esta combinación y el uso de un abono líquido, obtendrás resultados maravillosos que potenciarán el color y desarrollo de raíces, tallos y hojas, en un ambiente equilibrado.
A la hora de hacer un trasplante, necesitarás una maceta más grande para permitir que las raíces sigan creciendo.
Riego
Cuida sus raíces.
El Poto plateado
limpiar con paños húmedos de vez en cuando y rociar las hojas con un chorro tipo lluvia, es un grandioso estimulante de su belleza. Especialmente, en verano cerciórate de regarla manteniendo siempre la tierra humedecida y en invierno la tendencia será muy moderada.
Senecio rowleyanus o Planta Rosario
Perteneciente al género de las suculentas, emite un delicioso olor a canela cuando brotan sus flores blancas, entre la primavera al otoño.
Tiene un follaje conformado por hojas que parecen perlas. Por eso también la llaman Collar de Perlas. Cada una es un depósito de agua que ayuda a que esta planta resista de todo.
Niños y mascotas deben mantenerse alejados de esta planta, cuyo mecanismo de defensa en estado salvaje trae molestias en espacios controlados.
Afortunadamente, debe colgarse alto para que sus tallos finos y alargados, plagados de hojas carnosas, puedan desarrollarse a plenitud.
Temperatura
Climas que se mantengan entre 16 a 21 °C serán perfectos.
Y la temperatura mínima soportable, no debe bajar más allá de los 3°C, porque aunque es muy resistente, se puede afectar en su desarrollo colgante.
Si el verano es rudo, ella perfectamente se aclimatará, dada su procedencia ambiental templada.
Luz
Lo ideal para una Planta rosario o Collar de perlas, es mantenerse en espacios luminosos, con algo de sol directo, cerca de una ventana. Cuélgala estratégicamente y verás que te dará muy bellas recompensas.
Un balcón en interiores será su lugar favorito, toda vez que podrá nutrirse de buena iluminación, sin que el sol directo la bañe en forma permanente.
En verano, es imprudente someterla a los rayos solares entre las 11 a las 16 horas.
Sustrato y Abono
Y si le agregas un humus de gusano o lombriz, la nutrición será perfecta para ella. Esta operación la puedes aplicar dos veces por año. Pero hay jardineros expertos que también recomiendan el uso de un abono líquido para cactáceas, que deberá aplicarse entre primavera y verano.
Otra técnica de abonado consiste en usar un fertilizante líquido que contenga fósforo, potasio y muy poquito nitrógeno. Este las ablanda mucho, así que pendiente de este detalle nefasto para la Rosario.
Riego
Así que los riegos deberán ser muy moderados, tímidos. Siempre verifica antes que el sustrato se haya secado por completo. Una o dos veces por semana será la frecuencia estipulada en tiempos de crecimiento. Y garantiza que el agua escurra por los drenajes de la maceta.
Su mayor enemigo es agua en exceso. Las hojas mojadas tampoco son buenas. Pero si ocurre debes disminuir el riego esa semana.
En invierno, el Rosario entra en reposo y su sustrato ha de permanecer seco.
Estos mínimos cuidados le darán una sana vida a esta singular planta de hojas atípicas.
Hoya linearis
Hay variedades que crecen en ambientes naturales de países como Nepal, Birmania, China y la India.
Su nombre se debe al jardinero británico Thomas Hoya, quien asumió el cuidado de plantas tropicales que alegraban los jardines reales del Duque de Inglaterra.
Estas inflorescencias primaverales con forma de racimos sostienen muchas flores pequeñas que cuelgan.
La Blooming Hoya linearis, otra variedad hermosa que puedes guarecer en casa, emite un agradable sabor a vainilla.
Sus tallos tienen una tendencia a acrecer con una espiral curiosa que llama mucho la atención.
Nunca deberás podar una Hoya linearis, porque florece solamente en los extremos de las ramas. A menos de que estén secas, no cortar sus tallos jamás es lo procedente.
Temperatura
La mínima que tolera es de 10 grados. Si cultivas esta planta en un ambiente estable de unos 19 ° C o un poco más, la Hoya estará siempre agradecida.
En verano, ella se sentirá cómoda con más de 24°C. Pero si el aire es caliente y seco, las hojas comenzarán a retorcerse. No le gustará mucho. Así que la habitación debe ventilarse bien a fin de proveerle una mejor condición ambiental.
Por su parte, el invierno es el período de reposo. La Hoya entra en vacaciones, pero debes estar pendiente de que la temperatura interior se mantenga en 15°C, para que su sistema de raíces no se perturbe.
Luz
Algo de sol directo no le cae mal. Busca una estancia en tu casa muy bien iluminada.Puede ser una ventana o un balcón, donde puedas suspenderla con ayuda de una maceta colgante. Toma en cuenta que su sistema radicular no crece en profundidad, es más bien expansivo y algo débil.
Pero hay que aclarar que lo más conveniente son exposiciones solares mayormente difusas. Es lo más conveniente para ella en verdad.
De no tener luz natural brillante, sus fragantes flores escasearán en la primavera.La calidad de la floración dependerá del factor luz. No lo descuides.
Sustrato y Abono
Su requerimiento a nivel de suelo es que siempre cuente con un buen drenaje. Un sustrato universal, mezclado con perlita con turba o arena, ayudará mucho a que el agua permanezca bien.
En preparaciones caseras, toma una parte de arena, 2 de tierra de césped o jardín y humus, así como 3 partes de tierra de hojas. Esto le dará mucha estabilidad nutricional.
Cuando llegue el tiempo de floración, la Hoya necesita recibir la ayuda de un fertilizante mineral que sea aplicado en el riego cada 2 a 3 semanas.
Riego
En tiempos de crecimiento de la planta, el riego ha de ser muy moderado, cuidando siempre que la capa superior se haya secado antes de rociar con agua de nuevo. Esa es una norma que siempre deberás cumplir.
Evita a toda costa los encharcamientos.
El estancamiento del agua le quita la vida a la Hoya. Morirá si no controlas bien este factor. Pulveriza el cepellón para que no se seque por completo. Eso tampoco es favorable a sus hojas carnosas y curvas.
Y como le gusta mucho la humedad, puedes rociarla con agua tibia dos veces a la semana.
El invierno lo pasara bien regándola una sola vez cada dos semanas. Y en el verano, hazlo solamente una vez.
Será muy bonito que puedas aprovechar sus largos tallos como verdaderas cortinas vegetales. Coloca varios cestos colgantes en hilera y hermosas cascadas verdes alegrarán la estancia donde crecerá esta fabulosa planta de bajo mantenimiento.
Pelargonio
Abunda en Sudáfrica y ha llegado a reinar para siempre en patios y balcones del sur de Europa.
Andalucía, hermosa tierra española la adoptó como hija ilustre, con el esplendor de sus colores brillantes y alegres suspendidos en macetas igualmente coloridas que se convierten en un espectáculo digno de admiración, junto a calas también muy ostentosas
Otra variedad, el Pelargonium peltatum, mejor conocida como Gitanilla, es de flores muy coloridas, de hojas carnosas y pequeñas con 5 lóbulos y tallos que son verdaderas lianas que cuelgan en los patios de la ciudad de Córdoba, un espectáculo único en el mundo entero.
El más conocido, el Pelargonium radula, es muy aromático, de flores que aunque tengan el mismo color, varían en tonalidades. Ideal para adornar la entrada de las casas o áreas de alto tráfico, producen atmósferas hermosas y muy elegantes.
¿Cómo debes cuidar el Pelargonio? No es tan complicado como parece. Las claves de su mantenimiento son sencillas.Temperatura
Al igual que los geranios, no se molesta esta planta floral si atraviesa períodos de temperaturas altas, incluso soporta sequías. O inviernos algo severos.
El verano lo pasa bien siempre que los riegos sean constantes, sin que se ahogue la planta por culpa de un sustrato empapado. Recuerda esto: a medida que el clima mejora, esta planta rústica irá.
Aunque es una planta muy rústica que se adapta a la sequía, como todo en el reino vegetal, necesita unos mínimos cuidados. Anota estos datos para que no se te muera:
Luz
Vive feliz bajo el sol radiante.
Pero si la región donde crece es muy cálida, es conveniente que en las horas centrales del día, con mayor incidencia solar, tienes la obligación de protegerla apartándola a un sitio más fresco.
Sustrato y Riego
Toca que apliques un abono específico para esta planta tan generosa, bajo en nitrógeno, rico en potasio y fósforo.
Riego
Ejecuta una poda a finales del período invernal que permita fortalecer la planta en la venidera floración, prevista en el verano, donde si deberás regar con insistencia diaria, pero siempre cuidando de no enchumbar el sustrato.
A medida que las temperaturas van disminuyendo, entonces también los harán los riegos.
Tanto por esquejes como por semillas, se puede reproducir esta maravillosa planta, pero es preferible la primera opción, mucho menos laboriosa.
Verbena
Su nombre científico es Verbena Officinalis. Y ya ha n sido oficialmente categorizadas unas 200 tipos porque la gran adaptabilidad que ostenta ha generado muchas variantes o mutaciones.
Puede crecer en cualquier lugar del planeta. No se afecta grandemente con cambios climáticos, pero donde más se le da el tema ambiental es cuando se cultiva en el sudeste de Europa.
Su floración espectacular se inicia en la primavera y puede durar hasta que llegue el otoño. Como buena planta rastrera de origen, sus hojas son simples pero opuestas unas a otras.
En exteriores, se expande el tono morado de su flor en forma impresionante.
Temperatura
Soporta climas muy cálidos con naturalidad, sin daños principales ni colaterales. Y extremos, de muy bajas temperaturas, también los aguanta con gran estoicismo.
Luz
Debes tener esta planta en una zona muy luminosa de tu hogar, pero que a la vez cuente con semisombra que la proteja de la inclemencia solar.
Sustrato y Abono
El sustrato debe ser el que mejor controle el denaje del agua de riego. No hay peor enemigo para sus raíces que el agua estancada en la maceta.
En el periodo de la floración hay que fortalecerla con la aplicación de un abono orgánico de excelente calidad.
Un suelo arenoso le conviene mucho, a pesar de que la Verbena no exige nada y en realidad se adapta a cualquier tipo de sustrato, dado que esta planta pertenece a una modalidad subnitrófila.
Riego
Cada vez es más frecuente verla en macetas o tiestos, dentro de los hogares, porque en realidad exige muy poco y regala un espectáculo visual inolvidable.
De no darle este regalo, la planta morirá dañada por las corrientes de aire frío. En cambio, permanecerá contigo más tiempo si la podas en forma adecuada.
Es común aprovechar su belleza para hacer adornos variados en centros de mesa, terrazas, viviendas y mucho más.
Surfinia
De espectacular floración en verano, sus flores acampanadas miden entre 5 a 13 cms pueden acompañarte en espacios tan disímiles como jardines externos, terrazas o balcones y en cestos que cuelga, donde se notará aún más la fusión de hojas y flores, que van desde un intenso rojo escarlata a tonos violáceos, rosados y blancos. Sin duda alguna, su atractivo fundamental es la frondosidad de esta planta.
Crece rápido, por lo que un tiesto grande que aguante el enraizamiento determina un crecimiento óptimo, que se traduce en mucho más follaje verde y flores que desbordarán la maceta colgante.
No cometas un error de cálculo en este punto particular, porque de ello dependerá el futuro de tu Surfinia, muy parecida en su conducta a las Petunias.
Temperatura
Soporta temperaturas elevadas. Prefiere los climas muy cálidos. Y odian las nevadas invernales, el clima río de esta época, porque las mata. Tampoco vientos y lluvias.
Luz
Coloca en casa tu Petunia colgante en una estancia muy iluminada, durante prácticamente todo el día, si es que deseas ver flores hermosas.
Sus ramas, si no lo haces, se estirarán para buscar la luz natural del sol. Ella sabe que de no ser así, su crecimiento de detendrá y las flores no llegarán porque no fue estimulada correctamente.
Sustrato y Abono
Tiene tantas flores, tantas que evidentemente esta planta gasta bastante energía justo en este tiempo maravilloso de la floración. Un fertilizante líquido para plantas en flor no debe faltar. Ayudará a que estas duren bastante, al punto que podrás retirar las que se van marchitando, mientras otras nuevas van saliendo sin timidez alguna.
Aplica el fertilizante cada diez días, después de la primera floración, la cual casi siempre se presenta en los comienzos de la primavera.
Riego
En primavera, hay que regarla en días alternos, dependiendo de la temperatura. Y en verano la situación cambia, porque puedes aplicar en dosis diarias el agua que necesita para estar siempre bien hidratada.
Cero excesos y garantías de que el agua sobrante no se quedará atrapada en la maceta es fundamental.
Tampoco mojes las flores porque morirán. Se presentarán hongos destructores que teñirán de un amarillo mohoso la planta.
Garantiza también que el agua sobrante de la planta no se quedará atrapada. Evita encharcamientos regando solo lo necesario.
En definitiva, riega a diario de ser posible en días muy calurosos, pero controlado, con poca agua.
Mi nombre es Ricardo Gómez.
Desde pequeño me ha gustado leer y escribir. Ahora, que estoy cursando un máster en periodismo digital, colaboro como freelance escribiendo artículos para diferentes páginas web.
En especial me gusta compartir información sobre agricultura, siembra ecológica y medio ambiente. Entre otras aficiones 🙂
Muy útil. Busco una planta que da un flor blanca .muy bella pero abre y muere el mismo día .sale de las hojas gruesa como la sábila ..palo fuerte. No sé cómo sellama
Hola Pedro, echa un vistazo a este artículo: https://www.sembrar100.com/flores/blancas/
Muy buena pagina